Arranca 2024 y la conversación en tecnología empresarial gira en torno a los AI Co-Pilots – asistentes inteligentes integrados en las aplicaciones de uso diario. Si 2023 fue el año de adoptar bots y automatizaciones por separado, este primer trimestre de 2024 vemos cómo la IA comienza a venir “de fábrica” en muchas herramientas. Microsoft 365 ofrece un co-piloto de IA que ayuda a redactar correos o resumir reuniones, Salesforce incorpora asistentes en su CRM que sugieren próximos pasos a vendedores, y hasta herramientas de gestión de proyectos empiezan a traer funciones automatizadas (como generar un plan inicial a partir de un objetivo). ¿Qué implica esto? Que la automatización con IA se está volviendo omnipresente y ubicua, disponible para todo empleado en distintos contextos sin necesidad de grandes implementaciones por parte de TI.
Para las empresas medianas colombianas, esta democratización de la IA es una gran oportunidad. En GPM lo vemos como el complemento perfecto a nuestras soluciones a medida: por un lado configuramos agentes de IA específicos (como un chatbot de soporte, un flujo automatizado de ventas, etc.), y por otro lado tus trabajadores disponen de co-pilotos genéricos en Word, Excel, correo, que mejoran su productividad personal. Por ejemplo, un ejecutivo de ventas hoy puede apoyarse en la IA del CRM para obtener en segundos un resumen de las interacciones previas con un cliente antes de una reunión (en lugar de leer todas las notas), y luego cuando envía la propuesta, usar el co-piloto de su editor de texto para pulirla y hacerla más persuasiva. Mientras tanto, en paralelo, nuestro sistema de Automatización Comercial Inteligente podría estar ejecutando un drip campaign automatizado vía WhatsApp a otros prospectos. Todos estos asistentes – grandes y pequeños – colaboran para que la operación sea más ágil. Entramos en la era de “cada quien con su asistente digital”.
Otra tendencia clara en este Q1 es la omnicanalidad automatizada. Los clientes esperan poder interactuar con las empresas por el canal que prefieran (sea redes sociales, chat web, teléfono) y recibir la misma calidad de respuesta. La IA está facilitando esto como nunca antes. Por ejemplo, ya es factible tener un mismo cerebro de IA respondiendo tanto en texto (chat) como en voz. Imagina que un cliente llama por teléfono a tu línea de soporte: una operadora virtual con voz natural (basada en IA de texto a voz) atiende y entiende su pedido usando procesamiento de lenguaje, y va alimentando la misma base de conocimiento que usa tu chatbot de la web. En 2024, las mejoras en síntesis y reconocimiento de voz en español han hecho mucho más viable estos escenarios. Las empresas medianas pueden empezar con algo sencillo, como un IVR inteligente que entienda frases (no solo «marque 1 para ventas») y enrute la llamada o entregue respuestas básicas. Eso ya quita carga al call center humano. Si a la vez el chatbot de la web o WhatsApp utiliza la misma lógica, tendrás consistencia en las respuestas. Herramientas como Botpress incluso ya exploran facilitar este “multi-canal multi-modal” sin necesidad de duplicar esfuerzos de desarrollo.
En procesos internos, vemos un enfoque hacia la automatización preventiva y proactiva. ¿Qué significa esto? Que en lugar de solo automatizar cuando se le pide (por ejemplo, generar un informe cuando el usuario lo solicita), ahora los sistemas con IA pueden anticiparse. Ejemplo: En una empresa de manufactura, nuestra solución de Automatización Interna podría monitorear en tiempo real los datos de producción; si detecta que una métrica clave (digamos, tasa de defectos) supera cierto umbral, automáticamente desencadena un flujo: envía alerta a responsables, crea un ticket en la mesa de ayuda de ingeniería e incluso propone posibles causas basadas en datos históricos (“La línea 3 tiene 2 días sin mantenimiento, podría ser la causa”). Estamos dotando a los procesos de una inteligencia autónoma que toma la iniciativa ante eventos, lo que minimiza tiempos de reacción y evita problemas mayores. En Q1 2024 muchas empresas están interesadas en este tipo de automatizaciones “con cerebro”, porque extienden el beneficio más allá de la simple ejecución rápida, hacia la detección y respuesta automática a situaciones.
No podemos dejar de mencionar la consolidación de la integración de datos como base de todo esto. Con tantos co-pilotos y asistentes actuando, es vital que todos beban de fuentes de datos unificadas y confiables. Por ello, proyectos de integración de sistemas y limpieza de datos siguen en la agenda. La buena noticia es que también aquí la automatización ayuda: herramientas de iPaaS (Integration Platform as a Service) como Make, MuleSoft, Zapier y otros, se han vuelto más poderosas y fáciles de usar. En GPM, al iniciar 2024, estamos implementando conectores inteligentes que permiten que cuando el chatbot obtiene un dato de un cliente (ej. su número de cédula), automáticamente lo busque en el core de la empresa y en la base CRM para traer toda la ficha y presentársela al agente humano o alimentar otro proceso. Todo esto sucede en segundos. La capacidad de integrar rápido diferentes aplicaciones (legadas y modernas) es lo que hace posible la magia de la automatización punta a punta. Si tu ERP no habla con tu sitio web, o si tu CRM no está conectado con tu plataforma de marketing, es el momento de considerar integrar – hoy hay soluciones sin código que lo logran, y la inversión se recupera con creces al eliminar silos y reprocesos.
En síntesis, el inicio de 2024 se siente como tener un ejército de asistentes digitales trabajando codo a codo con tu equipo. Cada empleado potenciado con IA en sus aplicaciones diarias, cada cliente atendido en cualquier canal por un agente inteligente, y cada proceso interno vigilado y optimizado por automatismos proactivos. Por supuesto, el desafío es coordinar este ejército eficientemente y mantenerlo bajo control (priorizando las tareas correctas, supervisando resultados, etc.). Pero no hay que asustarse: con la estrategia correcta, la IA se convierte en el mejor aliado de tu organización. Desde GPM, nuestro rol es ser ese estratega y ejecutor tecnológico que te permita aprovechar al máximo estas tendencias sin perderte en la complejidad.
¿Te entusiasma la idea de un “co-piloto de IA” para cada miembro de tu equipo o un proceso que prácticamente se ejecuta solo?
Conversemos. En GPM te ayudamos a aterrizar estas tendencias a la realidad concreta de tu negocio. Ya sea integrando la nueva ola de co-pilotos en tus sistemas actuales, o creando soluciones personalizadas de automatización proactiva, estamos listos para impulsar tu inicio de 2024. Contáctanos y llevemos la asistencia inteligente a cada rincón de tu empresa, para que tú y tu equipo se enfoquen en innovar y crecer.








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